Paraguay tiene oportunidad de destacarse entre los emergentes
La mejora de calificación de Paraguay por parte de Fitch es un gran impulso para la economía, y se tiene la oportunidad de que el país se destaque entre un grupo de países de mercados emergentes, según el analista económico, Federico Callizo. La suba de calificación se da después de mucho tiempo, cerca de 3 años, lo que simboliza lo que sucede hoy en la economía.
“Resistencia a los shocks externos con un crecimiento que vino promediando el 4,3% en los últimos 5 años, a pesar de la recesión en Brasil (2015/2016), la caída de los precios de los commodities en 2014-2015, la volatilidad económica mundial y la fuerte depreciación del peso argentino en el 2018”, mencionó. Dijo que la mejora es una afirmación de que Paraguay está en el camino correcto. La economía desarrolló un historial de políticas macroeconómicas prudentes y consistentes, añadió. Los bajos déficit (o excedentes) fiscales resultaron en una baja relación deuda/PIB, y esta disciplina fiscal se institucionalizó aún más con la implementación de la Ley de Responsabilidad Fiscal.
Federico Callizo y José Cantero. Federico Callizo y José Cantero.
Paraguay debe fijarse en ser más competitivo para llegar al grado de inversión. “Tenemos que empezar a soñar en más y llegar a una calificación A o AA, como Chile, pero para eso necesitamos un trabajo interno y coordinado”, dijo el presidente del Banco Central, José Cantero. Agregó que hay señales claras que se deben dar, como la estabilidad, supervisión, regulación, ley de pensión, deuda externa, pero todo lo que se puede hacer es marginal, por lo que el campo que se tiene es inmenso. “La educación permite tener más acierto. si seguimos haciendo bien la tarea podemos llegar, pero implica gran esfuerzo”, dijo.
Fitch Ratings, agencia internacional de calificación crediticia, mejoró la calificación del riesgo soberano de Paraguay y lo ubica a un paso del grado de inversión. La nota pasó de BB a BB+, con perspectiva estable. En su último informe, se sustenta en la resiliencia demostrada ante los shocks externos, en el crecimiento económico favorable combinado con evidencia de diversificación económica, en el fortalecimiento de los amortiguadores externos y el compromiso continuo con la disciplina macroeconómica.